LAS EXPECTATIVAS EN LAS ALTAS CAPACIDADES

LAS EXPECTATIVAS EN LAS ALTAS CAPACIDADES

 

Popularmente se dice que nacemos con un pan bajo el brazo.

La realidad es que nacemos con EXPECTATIVAS bajo el brazo.

Nací con expectativas bajo el brazo: Las de mis padres, las de mi familia entera. Las de mi entorno.

Cuando crecí y mis altas capacidades resultaron evidentes, las expectativas crecieron exponencialmente.

“Con lo inteligente que tú eres, debes llegar a…”

“Con tu nivel, debes relacionarte con…”

Se esperaba de mí un determinado comportamiento, un determinado resultado, un determinado camino a tomar. Con las mejores intenciones, desde luego. Eso no lo pongo en duda. Yo, por mi parte, me fundí tanto en esas expectativas que las acabé creyendo mías. Inconscientemente adopté como propias las expectativas de los demás, de manera que me enfoqué en cumplir ese sueño. Tomé ese rumbo sin cuestionármelo.

Me propuse como objetivo de vida el sueño que otros tenían sobre mí. Y ese es un peso muy difícil de cargar. Por definición, las expectativas no se cumplen. Nunca. Porque una expectativa es en realidad una fantasía de futuro que hemos imaginado. Y el futuro nunca acaba siendo como lo habíamos imaginado. Es distinto siempre. No sé si mejor o peor, pero distinto siempre.

Como puedes imaginar, la decepción estaba asegurada. La decepción de los demás, que habían depositado en mí esos sueños (convendría analizar el por qué). Y también mi doble decepción. Doble porque sentí que había fallado a los demás al no cumplir esas expectativas. Me sentí incluso culpable por ello. Y, a la vez, sentí que me había fallado a mí misma al darme cuenta de que esas expectativas que perseguía ni siquiera eran mías.

Todos decepcionados.

Los demás, porque “les he fallado”

Yo, porque “he fallado a los demás” y “me he fallado a mí misma”.

¿Te imaginas a qué locura conducen las expectativas?

 

¿Tiene esto lógica para ti?

Revisa qué haces y, sobre todo, por qué lo haces.

¿Lo haces realmente por ti? Entonces adelante con ello. Creer firmemente en lo que se hace es éxito asegurado, porque no habrá tormenta ni oscuridad que limite.

 

¿Lo haces por los demás? Eso… Eso ya es otro tema.

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